Vicios y virtudes de los periodistas para sortear la crisis y crear un nuevo escenario de superviviencia


ENTREVISTAMOS A: Arantzazu Zugasti, directora de Noticias de Gipuzkoa.
AVARICIA: Dícese del afan desordenador de poseer y adquirir riquezas para atesorarlas.
EN LOS MEDIOS: Es pasar del criterio propio para publicar las noticias que interesan a convertirse en una máquina de hacer billetes que chalanea con las administraciones y las instituciones. Es lo contrario a la independencia económica.
¿Te parece la avaricia un pecado, un pecadito?
No sé si en el trabajo diario llegamos hasta ese punto. A la hora de hacer una apuesta informativa tienes que asumir qué te va a venir después y, cuando estás en el proceso, tienes que analizar si el camino que toma el asunto es bueno, malo, raro o complicado para medir si hay que parar o hay que seguir adelante. No sé si la avaricia en el proceso de trabajo es pecado.
¿Estás de acuerdo con que los medios padecen avaricia, tal y como lo hemos definido?
El objetivo de un medio de comunicación es ser influyente, que sus contenidos tengan cada vez una acogida más amplia. Viendo los límites que tiene Euskal Herria, no creo que nadie pueda cumplir la avaricia económica. Es verdad que en su día en Euskal Herria se fundó un medio de comunicación que luego se ha convertido en una empresa potente cuyo ámbito se ha vuelto totalmente español: Vocento. Aun así, todos los medios somos empresas y, en la medida que somos empresas, tenemos que funcionar con esa lógica empresarial. Seguramente los periodistas tenemos muy mitificado nuestra trabajo y nos gustaría que hubiera medios que estuviesen menos contaminados por las empresas. Pero nuestro primer objetivo es lograr un proyecto de empresa firme.
¿Se te ocurren ejemplos de avaricia en los medios?
Se puede dar el caso de que alguna información que demos no le guste a alguien y que se caiga una publicidad. De todas formas, queremos mucho a los anunciantes porque la apuesta que hacen por nosotros es contra ese Gigante (El Diario Vasco). Son muchos los que han venido haciendo frente a sus presiones y eso tiene un mérito enorme.
¿Algún antídoto?
Cuanto más firme sea el proyecto, mayor autosuficiencia. Seguramente a todos nos gustaría poder llegar a eso. A nuestro alrededor hay algunos ejemplos de ello: aunque se muevan en un ámbito político concreto, algunos medios de comunicación son capaces de hacer críticas y mover esa realidad porque no han perdido la credibilidad. Pero el camino no es fácil.
¿Y el camino a la absolución?
Acabo de leer ‘El Padrino’ y cuenta que las mujeres de los hombres que son miembros de la mafia van a misa a rezar por sus maridos para que vayan al cielo y no al infierno. En ese caso el camino para la absolución es rezar, pero no sé si nuestros pecados son para tanto…
¿Cuál de los siete pecados has cometido más?
La envidia. En la medida en que tenemos que sacar un producto nuevo cada día, todos los medios de comunicación nos preguntamos si lo que vamos a contar al día siguiente tiene algún interés. Ese es nuestro drama diario. ¿Qué es interesante y qué no? Muchas veces no lo sabemos. Todos entendemos que hay que informar sobre los casos de corrupción, pero ¿dar la noticia sirve para algo más que para ponerse la medallita? ¿Para qué sirve saber que lo más visto de nuestra web es no sé qué relacionado con Belén Esteban? Si al lector le das lo que quiere no es nada difícil seguir alimentando la bola. Pero es verdad que otras veces nosotros hemos abierto una línea informativa y luego nos hemos aburrido hasta nosotros mismos y lo hemos dejado. ¿Cómo nos ven? Nos preocupa perder la conexión con los lectores.
¿Cuál es el pecado más disculpable? ¿Y el más horripilante?
Siempre me ha parecido que el peor, en los medios y en la vida, es la soberbia. Te altera el enfoque completamente y eres capaz de cometer cualquiera de los otros pecados porque no tienes la capacidad de vivir la realidad con un mínimo de objetividad. ¿El más disculpable? No sé… A lo mejor la gula; con un mínimo de ambición los proyectos pueden salir adelante.
EL PROYECTO
‘Los 7 Pecados capitales del Periodismo’
– El primer post: ‘Las locuras de Zuzeu y los 7 pecados de los medios de comunicación’
– La presentación del Proyecto: ‘Los 7 Pecados del Periodismo’
– La Pereza: “Somos demasiado indulgentes”, según Ícaro Moyano.
– La Envidia: ““Es un privilegio ser periodista. Es un regalo””, según Ana Alfageme.
– La Lujuria: “Nacerá una nueva generación de medios en tres años”, según Marta Peirano.
– Proponemos #Pecadismo como etiqueta en Twitter.