La Tertulia de Enrique MenesesTres trotamundos, un solo Periodismo

Escrito por1001 Medios

14 Feb, 2011

Aventurero @emenesesm, enviada especial @arbeloa y free lance @anderiza

1001medios con Edurne Arbeloa y Ander Izaguirre from Rosa Jiménez Cano on Vimeo.

‘La verdad está ahi fuera’ no es una frase hecha. Es un mantra -con poco de ficción, por cierto- para periodistas como Edurne Arbeloa, Ander Izagirre y, por supuesto, Enrique Meneses . Los tres, trotamundos con denominación de origen, protagonizan una nueva edición de La Tertulia de 1001 Medios con un tema muy de actualidad dados los acontecimientos de los últimos días en Túnez, Egipto y demás ollas calientes: ser o no ser freelance.

El debate, lejos de convertirse en un retrato romántico del informador de raza, puso de manifiesto el abismo generacional que sufre la profesión así como la enorme saturación informativa que vivimos. ¿Quién está dispuesto hoy a coger una mochila e irse a miles de kilómetros para contar una historia? ¿Quedan aún aspirantes a Manu Leguineche o Walter Cronkite? ¿Es necesario que haya cientos de personas cubriendo un mismo suceso?

Ander hablaba de «libertad», mientras que Edurne se refería a la «seguridad». Él hace reportajes por su cuenta (Mineritos) y emplea tiempo y dinero propios en dar forma a ese «periodismo que le gusta»; ella, utiliza su condición de «asalariada» (CNN+, Cuatro) para acceder a aquellos lugares a los que otros no podrían ni acercarse. Ambos, en cualquier caso, son conscientes de que del buen periodismo, el independiente, no se come.

Meneses siempre tuvo las cosas claras: no hay que quedarse en España, hay que salir y saber compaginar «el oficio» con otras cosas sin estar «atornillado» a un mueble. Los problemas fundamentales de los futuros periodistas son, quedó patente, la falta de «referentes», de metas concretas -apuntaba Rosa Jiménez Cano-, e incluso de iniciativa. Aun así, los nombres de David Beriain o Unai Aranzadi no dejaron de salir en la conversación como provocadores de «chispitas en los ojos» de la gente joven; como antes hacía, por ejemplo, Ramón Lobo.

«¿Qué tiene que hacer entonces un periodista para dar un salto?». Es la pregunta del millón, «prestigios» y capacidades aparte. En tres ejes fundamentales debe apoyar su carrera si quiere destacar: los idiomas -imprescindibles para recorrer mundo-; la documentación como base para el análisis, que será lo que a corto plazo, según augura Meneses, demanden los medios de comunicación; y el amor por la aventura, ineludible.
La conclusión única, unánime, de esta apasionante charla lleva la palabra «optimismo» grabada a fuego. Es posible un periodismo diferente, aunque tendremos que cortar lazos y tirarnos en paracaídas sin esperar una red abajo: vivimos una época que nos lo pide. Periodista es quien lo intenta, por eso la supervivencia es un trabajo.

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